El mes de los nuevos proyectos



¡Ya estoy de vuelta! He pasado el mes de Agosto disfrutando de placeres que nos da la vida, de la familia, el amor, el mar, la buena comida y los helados. ¡Soy un gran amante de los helados! Con esta relajación es normal haber cogido unos kilos, pero no pasa nada, regresar a la rutina los quema sin problemas. Me embarco en el mes de Septiembre con la agenda llena de nuevas ilusiones y esperanzas. ¿No dicen que para recoger hay que sembrar? Pues el fruto de un trabajo bien hecho está a punto de madurar.


Por una parte, en Agosto he terminado la novela breve Riku desde los infiernos, una historia sobre uno de los personajes más entrañables de Tan dulce, tan amargo. Una editorial se interesó por ella antes del verano y en estos momentos ya la tienen en su poder. ¡Me ha quedado muy chula! Es la novela sobre adolescentes que siempre imaginé que algún día escribiría. 

Por otra parte, sigo dándole vueltas, reescribiendo y corrigiendo El lugar donde se pierden los niños, y ya he enviado la propuesta de publicación a alguna editorial...Eso sí, una vez más, le quiero cambiar el título y que vuelva al que ya tuvo, Los dones de Acracia. Con un año y pico de distancia desde que comencé a escribirla, puedo decir que es mi obra más épica, redonda y extraña, todo un manifiesto.

Y por supuesto, el gran acontecimiento de este otoño será la publicación de Rottenmeier. Os puedo decir que ya tiene fotografía de portada y que es alucinante. ¡Pero aún es muy pronto para desvelar sorpresas! Todo en su momento, quedan un par de meses para que esté en todas las librerías. Esta Navidad tendremos que regalar Rottenmeier a todo el mundo, ¿no?

En la foto: Molaría como portada de Riku desde los infiernos. Original Publicado por ~시로~
 

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